Trochando Sin Fronteras 31 de mayo de 2016
En varias regiones del país se siguen desarrollando las actividades de la Minga. Son más de 100 puntos de concentración y cerca de 70 mil campesinos, indígenas y demás sectores que desarrollan plantones y marchas por las principales carreteras.
El balance de ayer indica que se movilizó el pueblo Muisca de Cota, Bosa, Suba, Sesquilé y Chía, en apoyo a la Minga Nacional, y también expresando sus propias exigencias.
Unas 200 personas se manifestaron en la estación del teleférico de Monserrate, donde la policía llegó intimidando a la gente. Posteriormente se hizo una concentración a orillas del Río Vicacha o mal llamado San Francisco, uno de los afluentes del Bogotá. Finalmente los manifestantes marcharon por la calle 13 hasta la plaza de Bolívar.
Hoy en Bogotá las movilizaciones se desarrollaron en Ciudad Bolívar, sobre la avenida Boyacá, a la altura del barrio Lucero Bajo. Allí se reportaron dos jóvenes detenidos por la policía, quienes fueron trasladados a un CAI del sector.
Mientras que en otro de los puntos, ubicado en Berlín – Santander, las comunidades se encuentran sometidas al sabotaje continuo de las instituciones del estado. En este caso, por el corte continuo de energía eléctrica que se presenta desde el momento en el que concentraron las comunidades en ese sector. La vía de la soberanía y la que conduce de Cúcuta a Bucaramanga se encuentran fuertemente militarizadas, a fin de dificultar o evitar la llegada de más manifestantes a ese punto de concentración. Por otra parte, los personeros de la región siguen brillando por su ausencia y falta de compromiso en cuanto a la defensa de los derechos fundamentales de quienes protestan.
En algunas de las concentraciones ubicadas en los puntos de los departamentos de Arauca, Boyacá, Casanare, Tolima, vichada, continúan recibiendo a las comunidades que se movilizan. La fuerza pública no deja de hacer presencia, de manera ilegal toma fotos, graba las marchas y pide datos de los manifestantes. Las comunidades han denunciado la agresiva conducta de esos funcionarios, ya que se sienten agredidas y objeto de señalamientos.
Por su parte, el gobierno nacional se niega a reconocer el incumplimiento de los acuerdos establecidos con la Cumbre Agraria y sigue persiguiendo, hostigando y violentando a los líderes y participantes de la Minga, a través del envío de la fuerza pública. No obstante, el Ministro del Interior reconoció que los compromisos no se han dado como se pensó. Por otro lado, el ministro de Agricultura sigue defendiendo abiertamente los intereses de la clase burguesa, y dice que no permitirá bloqueos en las carreteras y que el paro es injusto, porque supuestamente el gobierno ha cumplido y que está haciendo un gran esfuerzo para lograr la paz.
En respuesta a esas declaraciones, los voceros de la Cumbre Agraria han declarado que, el hecho de apoyar el proceso de paz no impide que el pueblo reclame sus derechos y proteste cuando lo considere necesario.
En rueda de prensa, los voceros de la Cumbre hicieron referencia también al incumplimiento de los acuerdos pactados por el gobierno nacional así hay temas como el de la adjudicación de tierras, los proyectos de infraestructura y el tema de garantías y derechos humanos, en los cuales el avance es mínimo o casi nulo. Respecto a la línea de financiación a través del Fondo de Fomento Agropecuario, el Gobierno Nacional se comprometió a invertir $250 mil millones durante la vigencia de 2014 de los cuales solo ha entregado el 40%. En cuanto a las Cumbres de Paz solo el 30% de recursos se han desembolsado.
Respecto a los ocho temas de fondo, contenidos en el Pliego Único Nacional, se puede decir que después de tres años de haber iniciado la negociación, no hay acuerdos concretos y que solo en tres de ellos se han generado algunos intercambios de información y de propuesta. Tampoco existe compromiso real de parte del gobierno nacional para avanzar en las propuestas hechas por la Cumbre Agraria.
Los representantes de la Cumbre insistieron en que están dispuestos a dialogar con el gobierno y a participar en los debates que se desarrollen el Congreso de la República que den viabilidad al cumplimiento de los acuerdos pactados con el gobierno.
Las comunidades indígenas, representadas por la ONIC, expresaron que se unen a la minga, ya que el gobierno tampoco les ha cumplido el 80% de los compromisos.
Las mentiras del gobierno
Mientras el estado se empecina en deslegitimar la movilización nacional, los pueblos no se rinden pues las condiciones socioeconómicas del país no mejoran. Los siguientes datos acerca del uso y acceso a la tierra son bastante dicientes de la crítica situación que se vive en el campo:
* De los 113 millones de hectáreas censadas, el 71% no pertenece a los campesinos, y el 69.9% de los predios tienen una extensión menor a las 5 hectáreas.
* Los terrenos con áreas superiores a 500 hectáreas están en poder del 0.4% de los propietarios y ocupan el 41% del área censada.
* El índice de Gini (que mide la desigualdad de los ingresos) en Colombia es de 0.85, donde 1 es el máximo de desigualdad.
* El 20.3% de la población rural entre 5 y 16 años no asiste a ninguna institución educativa.
* El 73,7 % de la población rural entre los 17 y 24 años no asiste a ninguna institución educativa.
* El 12.5% de la población rural mayor de 15 años no sabe ni leer ni escribir.
Finalmente los voceros de la Cumbre Agraria manifestaron que la Minga es de carácter indefinido y que se levantará cuando el gobierno nacional se comprometa con hechos y se garantice la vida digna de las comunidades.