Quito, Entrevista a Guillaume Long, Ministro de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana
Publicado en IL Manifesto Edición 28/07/2016
Geraldina Calotti
A pesar del terremoto de abril (500 muertos y más de 2.500 heridos, la peor tragedia en 67 años), el Ecuador no se ha dado por vencido. No obstante sea un país pequeño, con los gobiernos de Rafael Correa se ha convertido en un punto de referencia competente sea en el plano regional que internacional en proponer una idea de desarrollo junto a la justicia social. Hace cuatro años, ha acogido en su Embajada en Londres al periodista perseguido por los Estados Unidos, Julian Assange, el fundador de Wikileaks, lanzando un mensaje preciso a Washington. Este año ha asumido la presidencia pro – tempore de la CELAC 2015 – 2016, la comunidad de los estados latinoamericanos y del Caribe que deja fuera solamente a USA y Canadá. Hospeda a la sede UNASUR, dedicada a la memoria del ex presidente argentino Néstor Kirchner. Y ha hecho sentir su voz en la OEA en defensa de la soberanía del continente de la injerencia externa.
El Ministro de relaciones exteriores y Movilidad humana, Guillaume Long- historiador y académico – ha sostenido recientemente la batalla de la Venezuela bolivariana contra los ataques de las derechas, y el diálogo bajo la protección de la UNASUR. En aquel contexto lo hemos encontrado en Caracas y lo hemos vuelto a encontrar en Roma, en la sede de la Embajada, para el lanzamiento de la campaña internacional contra los paraísos fiscales.
Cuál es el motivo de este viaje?
Una breve visita al Vaticano, para encontrar al secretario de Estado Pietro Parolin. A èl le hemos entregado una carta de Rafael Correa, nuestro presidente, sobre la nueva iniciativa internacional que estamos lanzando para abolir los paraísos fiscales. Un pacto ético que propodremos en un referendum en febrero 2017, en concomitancia con las próximas elecciones. El presidente ha explicado al país de qué cosa se trata y ha ilustrado la propuesta: calculamos que el 30% de nuestro Producto interno bruto se encuentra en el exterior en países complacientes en los cuales es posible evadir los impuestos. Una cifra importante que podría servir para la reconstrucción post terremoto, a hacer frente a los planes sociales compensando la caída del precio del petroleo. Como han evidenciado los Panama Papers, el problema golpea a los países del sur, pero también al primer mundo. Los paraísos fiscales son un atentado a la soberanía económica de nuestras naciones, son la cara invisible y más vergonzosa del capitalismo moderno aquel sin nombre. Apenas tendremos la opinión de la Corte Constitucional, llevaremos la discusión a la Asamblea general de la ONU, en septiembre. Luego, iniciaremos la campaña para el referendum. Si vencerá el sí, la normativa vigente vendrá adecuada a la voluntad del pueblo ecuatoriano: todos aquellos que aspiran a cubrir cargos públicos tendrán un año para traer al país los fondos en el exterior, para luego ser interdictos para los cargos públicos.
Y qué cosa se esperan del Vaticano, que en éste ámbito tiene ya otras cosas para discutir?
Este es un tema que es de mucho interés al Papa Francisco. El Presidente ha tenido ya diversas discusiones con la Iglesia y con el Pontífice. Cuando ha sido invitado a participar en las discusiones sobre la Encíclica Laudato Sí, el tema de las cuentas off shore que debilitan a los países en vías de desarrollo ha surgido con fuerza. Los estados del sur vienen considerados inestables o poco confiables también porque los evasores los desangran llevándose el dinero al exterior. Sobre la cuestión de la finanza ética y de la justicia tributaria muchas ong y organizaciones de la sociedad civil han hecho ya propuestas, debemos trabajar juntos. También los estados del G77 pueden hacer mucho. La Iglesia tiene una gran capacidad de penetración ideológica y ahora que hay un nuevo liderazgo debemos aprovechar para hacer pasar este mensaje. Cuando ha visitado el Ecuador, Papa Francisco ha dicho que se necesita humanizar el capitalismo, que no se puede vivir en un sistema con similares contradicciones. El Presidente Correa tiene una gran admiración por Su Santidad.
Un tema que encontrará fuertes resistencias en América Latina. En los Panama Paper ha surgido el nombre del presidente Argentino Mauricio Macri, el del ex presidente de la Cámara Brasileña Eduardo Cunha, de exponentes de las derechas venezolanas, peruanas, colombianas….. No piensa que con el retgreso de las fuerzas conservadoras, las relaciones sean ahora muy desfavorables en el continente?
La batalla está abierta. Yo no creo en la tésis del final del ciclo progresista, inaugurado por los gobiernos que han ganado las elecciones al inicio del siglo. No creo que regresaremos a los años 90: primero que todo por los grandes progresos obtenidos en términos de reducción de la pobreza, de la desigualdad, en la construcción de infraestructura. Desmontar todo esto, para las derechas, implicaría asumirse un alto nivel de conflictualidad social. Por otro lado, aunque con todas las diferencias de acentos, es la primera vez que han estado 12 gobiernos progresistas en las regiones. Antes estaba solamente Cuba, luego llegó Venezuela, la Argentina, el Brasil, Bolivia, Ecuador, Nicaragua… Ahora está siempre Cuba, que no está más sola. Cuando estas solo, es más fácil atacarte, cuando tienes aliados es más difícil organizar los acostumbrados golpes. Hoy tenemos izquierdas que cuentan, y aunque si pierden las elecciones lo hacen por pocos puntos, pero ya han dado prueba de saber gobernar, y podrán regresar luego de haber aprendido de los propios errores.
Esta campaña suya es también una jugada electoral contra el avanzar de la oposición? Una cierta izquierda acusa a Correa de haber traicionado los orígenes de la Revolución Ciudadana.
Cuando era jóven, si las izquierdas alcanzaban a unirse, llegaban al máximo al 5%. Hemos heredado un estado casi en quiebra. Entre el 96 y el 2006 han caído 7 presidentes. Nos hemos encontrado frente a un país quebrado, con graves problemas de institucionalidad, pérdida social de autoestima, hemos tenido una fuerte oleada de emigrantes. Correa ha llamado a una refundación a través de un proceso constituyente para establecer un nuevo pacto social. Para vencer hemos tenido que formar una alianza más amplia unida por una plataforma común, Alianza PAIS: un frente unido de 8 formaciones de centro-izquierda que va desde el Partido Comunista a los socialista hasta otros más moderados. Hemos fundado un partido desde lo alto, del gobierno: que por esto no podía ser un partido de cuadros porque no tenía los piés bien plantados en el 900, no había una historia de resistencia a las torturas, debía ser un partido de masas. Hemos reducido el índice de desigualdad del 54 al 47, pero ésto todavía es nada sobre una escala general. Pero hemos demostrado de saber gobernar, porque hoy se está mejor que bajo gobiernos precedentes. Hay una leva de cuadros políticos muy jóvenes, provenientes de los sectores populares, que han estado en el gobierno con una alta profesionalidad. Hemos hecho fracasar un golpe de estado, sufrido la constante agresión mediática. Hemos recuperado el estado nación, creado algunas condiciones de modernidad, pero estamos lejos todavía del socialismo. Pero si me pregunta si somos socialistas, yo, por mí, respondo que sí: aunque si considero que no debemos repetir los errores del pasado, caer en un socialismo gris y homologante, masculino, caudillista que cancela las diferencias. Somos un país plurinacional. Desde este punto de vista podemos hacer una fuerte crítica al capitalismo que nivela y aplana, impone los mismos modelos de consumo, la misma narración engañosa. A veces, pero el remolino del empeño cotidiano te absorve, se tiende a descuidar la base del partido, vaciándolo de sus mejores cuadros por la actividad de gobierno. Es un error al que se debe poner remedio con el retorno de una ética que neutralice el impulso clientelista. Siempre hemos sabido que el ejercicio de gobierno desgasta, y que se necesita mantener vivos los principios y el empeño. Las derechas, sinembargo, no tienen peso ni credibilidad para construír una alternativa.
Pero han perdido piezas importantes del movimiento indígena, que hoy les contesta.
El de la CONAIE es un tema complejo e indica el problema al que me refería primero: el vaciamiento de los cuadros políticos formados a un indigenismo más materialista y la sobrevivencia de un liderazgo más clientelista, que representa una facción más fundamentalista, también muy vinculada a ong europeas y a financiamientos poco transparentes provenientes de afuera. Es el mismo problema que se encuentra enfrentando Evo Morales en Boliva. En todo caso, se trata de sectores muy marginales que no logran consenso en el país.
Usted es también Ministro de la Movilidad Humana. Cuales son sus deberes?
Nuestra constitución contempla la ciudadanía universal: tenemos un bajo índice de petición de vistos, la mayor cantidad de refugiados de América Latina: más de 60.000, la mayoría son colombianos que huyen de las persecuciones de los paramilitares y de la guerra. Tenemos una agenda progresista para ayudar a nuestros migrantes en el exterior que han dejado el país cuando la situación económica era dramática. Hoy, se encuentran en dificultad por causa de la crisis económica que atraviesan los países del primer mundo: en España, en Italia. Nuestros Consulados acompañan a la comunidad en defensa de sus derechos, y les ayudan a regresar a casa donde se benefician de sus plenos derechos.
Recientemente, Correa ha dicho que el Brexit golpearía también la economía del Ecuador, Por qué?
Lo ha dicho mirando a la situación de la economía global y a la marcha de los mercados, que se repercute sobre el dólar y también sobre nuestra economía que lamentablemente está todavía dolarizada, y sobre las economías cercanas como la colombiana, cuya moneda ha sufrido una fortísima devaluación. El Brexit nos entristece , porque muestra los límites del proyecto de Unión Europea. El grande límite de América Latina es de no haber sabido desarrollar a tiempo una verdadera integración.
Traducido por Gabriela Pereira