Las comunidades entraron en la sede de la revista exigiendo, en Colombia, una verdad que ayude a construir paz. “En Colombia el poder sigue siendo centralizado, se siguen tomando decisiones desde Bogotá, se escribe desde Bogotá y era necesario venir acá y también protestar”.
“Es necesario protestar en contra de aquellos que desinforman y no contribuyen a la construcción de verdad”.
Edgar Alberto Velasco, AISO
En la acción se enfatizó la estigmatización de la que son víctima las comunidades indígenas y a la guardia. Ejemplo de ello, se destacan las palabras de Carlos Vélez, quien señaló que a la plaza de Bolívar el movimiento indígena y la guardia había entrado armada. Como resultado, la acusación profundizó una narrativa de odio y exclusión, desconociendo la autonomía, el gobierno propio y las luchas por la paz desde los pueblos indígenas.
Después de la movilización, y ante la avalancha de mensajes estigmatizantes, las comunidades representadas por AISO hicieron una rueda de prensa en la que puntualizaron el porqué de sus acciones, además de desmentir las acusaciones hechas. “En la Constitución Política de este país existe el derecho fundamental a la protesta, ejercemos nuestro derecho y en el marco de ese ejercicio es que llegamos a la Revista Semana”.
Ante las denuncias por daños en propiedad privada y lesiones personales, desde AISO señalaron que sus acciones fueron pacíficas. “Nos han acusado de utilizar violencia contra un vidrio… de atacar a un vigilante”, rechazaron que se oculte la verdad más cuando se puede evidenciar en vídeos que no se atacó las instalaciones de la revista o a personas que laboran en ella. Expresaron que, controlaron al vigilante protegiendo a menores de edad y adultos mayores que participaron en la manifestación, puesto, tenía un perro y primaron la integridad de los participantes en la protesta.
En la rueda de prensa, se convocó a los medios nacionales e internacionales para contribuir con la veracidad en el territorio nacional. “En Colombia la verdad está herida, masacrada”. Destacaron, también, la labor de los medios independientes, alternativos y populares, los cuales, según los miembros de AISO, han contribuido a la existencia de la verdad. En sus intervenciones propusieron un diálogo nacional e internacional sobre el papel de los medios en la guerra y el papel de estos en la construcción de paz. “La libertad de prensa no puede ser hablar lo que se me da la gana, no puede ser palabras o escritos que generen violencia, que generen odio, y que generen racismo”.